El casco antiguo es el barrio más histórico y más animado de la ciudad. Salga a descubrir sus pintorescas callejuelas de adoquines que poseen tiendecitas y restaurantes donde se sirven especialidades locales como la Socca o la pissaladière. Conozca también varios monumentos y sitios históricos en cada esquina como la Capilla de la Misericordia o la Catedral Sainte-Réparate.

Es en el casco antiguo, en Cours Saleya, donde se pone el mercado de las flores, una de las visitas imprescindibles de Niza.